Muchos de los problemas que presentan los hormigones, deben solucionarse con métodos de inyección:
Corte de Humedades
Eliminamos vías de agua en el hormigón mediante la inyección de espumas especiales que al reaccionar con la humedad y el agua (acuareactivas), forman geles obturadores que taponan la fuente.
Combinando diferentes presiones y diferentes velocidades de reacción de las espumas, conseguimos eliminar humedades en garajes, sótanos y lugares de difícil acceso que no pueden ser tratados en su origen.
Reparación de fisuras estructurales
Ejecutamos inyecciones de resina epoxi para consolidar fisuras y daños en el hormigón. De esta manera, conseguimos que todos los elementos de la estructura trabajen de forma homogénea (monolítica) asegurando su resistencia y efectividad.
Realizamos un corte profundo de la fisura del hormigón hasta casi llegar a su base. Posteriormente tapamos la superficie con un mortero epoxi, dejando colocadas las válvulas de inyección de la resina epoxi. Posteriormente, vamos inyectando a baja presión de manera ascendente por los inyectores hasta dejar la fisura saturada de resina.
Es importante elegir la resina de inyección adecuada a los espesores de la fisura. Si se supera el espesor recomendado, se puede producir una reacción exotérmica que arruine la efectividad del material llegando en ocasiones a arder.
Existen además muchos tipos de inyectores en diferentes diámetros dependiendo del caudal y tipo de fisura a rellenar.
Una fisura en el hormigón que no recibe tratamiento a tiempo, puede ocasionar daños importantes en la estructura. Los movimientos del hormigón y la posible entrada de agua llegando hasta las armaduras, ocasionan daños muy importantes. Reparados a tiempo apenas suponen un coste económico significativo frente al ocasionado por falta de mantenimiento preventivo.
Consolidación de losas de hormigón
Debido a muchos factores como una mala compactación, aguas de escorrentía bajo la losa y muchos otros, en ocasiones se ven afectados los asientos de las losas sobre el terreno. Existen soluciones para estas patologías en forma de inyección de micro morteros de altas prestaciones y baja o nula retracción. Su gran fluidez hace que lleguen a penetrar en las oquedades rellenando los huecos y consolidando las losas.
Taladramos totalmente las losas y repartimos los inyectores en toda la superficie afectada. Inyectamos a baja presión hasta rellenar los huecos entre losa y terreno corrigiendo los problemas de asiento y tableteo.